Sólo cuando se vive el arte como una necesidad irrenunciable,como un demonio que obliga a actuar sin "razonar",se logra dejar lo seguro por lo incierto,preferir la aventura a lo tranquilo
Sólo cuando se vive el arte como una necesidad irrenunciable,como un demonio que obliga a actuar sin "razonar",se logra dejar lo seguro por lo incierto,preferir la aventura a lo tranquilo