Sólo cuando se vive el arte como una necesidad irrenunciable,como un demonio que obliga a actuar sin "razonar",se logra dejar lo seguro por lo incierto,preferir la aventura a lo tranquilo
lunes, 8 de abril de 2013
Higuera
Ese día la higuera confundía camaleonicamente el tono de sus ramas con el color del cielo. Y allí estábamos de nuevo todos otra vez, incluida yo. Deseando agazaparme entre colores cual higuera y cielo,fundiéndome sin presencia.
El cuadro salio sordo de color,silencioso, un reflejo del tanteo del momento.Para mi pa-ella.
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