miércoles, 23 de octubre de 2013

Ingredientes.


 
 
 
 
 
Fábula. El padre y el hueso de jamón
 
Dora llevaba años preparando ese guiso a fuego lento, para darle a probar a su padre de su mejor receta; el éxito de su constancia. Alguna que otra vez  le había llevado  arrastra hasta el puchero y alargando el brazo cuchara en mano, había intentado que  lo probara a toda costa, pero él siempre se negaba diciendo: "esto no es lo que espero de ti".
 La pobre muchacha, lo intentaba una y otra vez, sin ningún resultado. A veces, no lograba ni  que él se acercara a verla a la cocina. Pero Dora seguía preparando distintas recetas día tras día hasta dar con la apropiada. No se conformaba con el consentimiento de otros, no buscaba éxito alguno sino la aprobación de su padre, el respeto a su trabajo. Un día, sentada en el suelo, cortando cebollas en juliana fina, se prometió firmemente que no pararía hasta dar con el sabor perfecto; el sabor del color. La sopa que haría que el padre de Dora aceptara su esfuerzo.
 No paró de intentarlo una y otra vez, se documentó, hizo cursos, empezó a darse a conocer y sus aromas se extendieron  por distintas localidades. Ese día, intentó entrar en la escuela de un prestigioso maestro no con muchos ánimos de ser admitida, pero lo fue. Siguió aprendiendo y practicando, sin saber que su padre había estado  estudiando sobre los maestros de su hija y se dio cuenta que  había logrado su propósito, ser lo que ella quería ser.
 Cuando  regresó de su aprendizaje en otra ciudad, su padre le dijo:
- Dora tengo un regalo para ti, he visto lo que allí cocinabais y he decidido que quiero que me cocines a mi lo mismo. Toma, un hueso de jamón, como el que os daban allí.
 Ella sintió el orgullo de su padre y sonrió, él mismo le había puesto los ingredientes en bandeja y se los había colocado en la mesa.
 
  
 


El pardo

 
El ángel de piedra custodiaba el palacio, había esperado un año entero a que volviera. Quería encerrarla  para siempre en los jardines de palacio, con la intención de que cada mañana, al hacer su paseo de rigor, pudiera encontrarla. Ella volvió esa mañana,  y él jugó sus cartas, como el año anterior pero con mas desgana e igual que el año anterior el volvió a perder para esperar de nuevo  a que volviera.

domingo, 6 de octubre de 2013

Bodegón de coches. Fuenlabrada.

 
Bodegón de coches
(comentario próximamente)

PREMIO: Batanero Díaz. Villa Condal de Cifuentes


La manguera amarilla
Ese día todas las mujeres del patio de vecinas me trataron muy bien y me abrieron las puertas de su casa. Algo que me encantó de las palabras del jurado "...nos ha gustado mucho que seas una chica y que seas joven". Y algo mas, una sensación; no logro acostumbrarme a mirar de reojo a los asientos de atrás de Rocinante y ver a mi regreso que van vacíos y que mi cuadro se ha quedado en el pueblo al que he ido a pintar.
 



Obras realizadas en la Cátedra Francisco de Goya

Javier I

 Detalle
 
 Javier II
 

Detalle

 Obras I y II
 
 Bodegón
 
Detalle

viernes, 4 de octubre de 2013

Diario de una Cátedra

Viernes 27:


El curso clausuraba su recorrido , diploma y otras formalidades, despedidas que no llevo bien, nuevos pintores y buenos amigos que volvían a su origen, El viaje de regreso rememorando e interiorizando  frases que me acompañarán para siempre en mi trayectoria como pintora y como persona. Frases que consiguieron conmoverme y  emocionarme y que latirán en mi cada vez que me ponga delante de un lienzo en blanco:

La pintura tiene que ser el soporte de una emoción, si no es así se convertirá en algo totalmente banal"
 
   Antonio López
“Cuenta con tu pintura como es tu interior, la realidad es un punto de partida para contar como es tu alma”
Antonio López

Encuentra en el espacio que te rodea las cosas interesantes para ti, y haz que tengan un carácter universal”
                                                                      Antonio López
 

Detalle

jueves, 3 de octubre de 2013

Diario de una Cátedra


JUEVES 26:

El punto de inflexión había pasado y la semana comenzaba a descender, el agotamiento ya calaba el cuerpo, pero la emoción y las ganas por aprender seguían latentes, una larga charla sobre arte sirvió de cierre a la última tarde. De nuevo en torno a la escalera, sentados en el suelo, a su lado. Las ganas de contar de aquel hombre, pese a su edad, eran inagotables y cuando cesaban sus palabras se podían masticar en el silencio el peso de nuestras reflexiones. Era capaz de conseguir ese efecto en todos nosotros a la vez, siempre nos dejaba pensando en silencio, cada uno en la soledad de sus ideas.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Diario de una Cátedra



 
 
 
MIERCOLES 25:
Ese día sin saberlo tocaba poner mis telas a juicio, me propuso ver mi dossier, quien me iba a decir a mi esa mañana que además de tachármelo de cursi, haría conmigo lo que tan bien se me da a mi hacer con los demás pintores y compañeros. Y vaya si desnudo mi carácter.
 Supo leerme a mí en mi pintura  y vio una persona con carácter en ella, algo masculino en el trazo, segura, de pintura sincera y notas secas en mi carácter .
 
-Eres algo seca, me dijo y tras quedarme callada unos segundos asimilando sus palabras  rió conmigo cuando respondí, “de acuerdo, lo admito. Lo soy”


martes, 1 de octubre de 2013

Diario de una Cátedra



MARTES 24:

Desperté descansada, radiante de emoción y sensibilidad. Tenía la fuerza de una tormenta enredada en los dedos de la mano izquierda, estaba deseosa por desatarla y así me puse a pintar.

Él llegó con la energía algo mas gastada, apenas noté su entrada, al no ser, por el revuelo  de juventud que se formó en torno a la escalera a los pies del maestro. Hablaba de sensibilidades, de alma. Hablaba de Bacon, de Goya  de los "cacharritos" de Morandi....